El ministro de Educación, Gerardo Varela, enfrentó la polémica surgida luego de que pidiera a los colegios «hacer un bingo» para solucionar problemas de infraestructura, descartando una renuncia a su cargo y que lo ocurrido «fue un desafortunado ejemplo».
A través de un punto de prensa a los medios de comunicación, el secretario de Estado pidió «las excusas correspondientes», pero hizo hincapié en que dicha instancia «no debe impedir que se discuta el tema de fondo, que es la calidad de la educación».
Consultado sobre la reiteración de hechos que ha tenido que explicar y la opción de presentar una renuncia, Varela aclaró que «no he pensado en dar un paso al costado».
Varela reiteró que mejorar las condiciones educacionales en la nación «requiere un esfuerzo de todos», destacando que «el Estado no se la puede solo para solucionar todos los problemas».
«Cada comunidad es responsable y debe comprometerse con sus proyectos locales», añadió.
La situación generó críticas desde diversos sectores políticos, quienes remarcaron la nueva «salida de libreto» de Varela.
Álvaro Elizalde, senador y presidente del Partido Socialista, dijo que esta situación «al parecer refleja la opción que tiene el Gobierno en el tema».
Por su parte, el senador Manuel José Ossandón destacó que el secretario de Estado «está muy lejos de la derecha social que Chile necesita y que algunos llevamos años construyendo».
Fuente: 24 Horas