l líder de Ciudadanos, Andrés Velasco, se encuentra por estos días en el norte de Chile. Ayer estuvo presentando a los candidatos a diputados de su sector en Antofagasta y hoy estará en Calama. El miércoles viajará a Talca, ciudad que es parte de la circunscripción en donde competirá para llegar al Senado en marzo próximo. “Uno no elige donde nace, pero sí donde quiere servir. Yo tengo vínculos personales con la región porque la familia de mi padre era talquina”, dice.
En conversación con “El Líbero” el ex ministro de Hacienda se refiere a la nueva coalición que formó hace algunos días con Amplitud y Red Liberal -reemplazando a Sentido Futuro- y comenta que apuntarán a “ese 97% de los chilenos y chilenas que no está inscrito en un partido tradicional, que no se siente identificado con las maquinarias políticas y con los operadores”. Además el ex candidato presidencial se refiere a los distintos abanderados que competirán el 19 de noviembre.
– El domingo inscribieron a sus candidatos al Congreso y a los Consejos Regionales. ¿Cuáles son las expectativas que tiene Ciudadanos en esta elección?
– Creemos que esta es la primera elección que va a dar un vuelco en la política chilena y va a dejar atrás la nefasta cultura del binominal y va a abrir espacio a nuevas ideas y nuevas coaliciones. Va a ser una elección de recambio generacional y en ese contexto, Ciudadanos y la alianza Sumemos espera elegir al menos dos senadores y un grupo importante de diputados.
– ¿Cuál es el desafío político de Ciudadanos en la elección de noviembre?
– Primero que nada instalar las banderas del centro, de la independencia, de la sensatez y de la moderación, que han estado muy ausentes de la política chilena. Y que eso se exprese además en un contingente parlamentario para seguir defendiendo esas ideas a partir de marzo próximo.
– Al inscribir las listas parlamentarias, lo hicieron en un nuevo conglomerado, llamado Sumemos. ¿A quiénes apunta este proyecto?
– A ese 97% de los chilenos y chilenas que no está inscrito en un partido tradicional, que no se siente identificado con las maquinarias políticas y con los operadores. Que está aburrido de los gustitos ideológicos de lado y lado, y que quiere una política más sensata, más prudente, y con más sentido común.
– Se lo pregunto porque por estos días, da la impresión que todos quieren apuntar al centro. Además que si uno mira los números de la CEP, arrojan que un 39,1% se identifica con el centro, pero dice no tener representación. ¿Cree que cobra más relevancia un proyecto de estas características en este minuto?
– Absolutamente, hay una cantidad grande de personas que no se ven identificadas, ni reflejadas, en las dos actuales coaliciones; que están cansadas que la política chilena sea como un restaurante con dos platos, que sólo tiene pollo y tallarines, no hay ni carne, ni pescado ni verduras. Por supuesto que en época de elecciones las coaliciones tradicionales van a tratar de disfrazarse del centro, pero los votantes no van a mirar sus palabras, sino que los hechos. Por ejemplo, cuando Guillier habla de la continuidad de un conjunto de reformas mal pensadas, mal diseñadas y mal llevadas a la práctica, repletas de gustitos ideológicos, la verdad que es muy difícil ver el centro ahí.
– Previo a las primarias, Ciudadanos tuvo un gesto con Evópoli, y más adelante tuvo conversaciones con la DC. ¿Cree que en un futuro podrían converger con estos partidos?
– Así lo espero. El centro en Chile tiene más de una historia, más de un tradición y más de una cultura. Nosotros no pretendemos ser los únicos representantes del centro y esperamos que esas conversaciones fructifiquen más adelante. Nuestro proyecto no es a tres meses, esta es la primera de muchas elecciones que esperamos disputar y por lo tanto, esto recién comienza.
– Ahora, las conversaciones con la DC fueron cortas. ¿Tenía sustento realmente un acuerdo con ellos?
– Conversaciones formales nunca hubo, sino que aproximaciones muy informales. Pero el Partido Demócrata Cristiano al final tomó una postura que cuesta entender, que es asociarse con dos partidos con quienes comparten poco y nada en materia de ideas y, como es bien sabido, eso causó molestia y división interna. Nosotros no nos metemos en eso, y decidimos sencillamente que el futuro es largo y que habrá más de una oportunidad para conversar y trabajar juntos.
– Jorge Errázuriz dijo hace algunos días que votará por Sebastián Piñera, pero además que tenía la sensación de que muy mayoritariamente Ciudadanos votará por el ex Presidente Piñera. ¿Qué le parece?
– Me parece que el partido tomó una decisión clarísima y es que en primera vuelta no vamos a apoyar a nadie, y eso es ciertamente lo que yo voy a hacer.
– Independiente de eso, parece un poco paradójico, considerando que varios de los dirigentes de Ciudadanos fueron parte de la DC, que se sientan -o por lo menos, según lo dice Jorge Errázuriz-, más cercanos a Piñera que a la candidata de la DC, Carolina Goic.
– El 90% de la gente que está en Ciudadanos nunca ha militado en un partido político, y me incluyo. Por lo tanto, no tenemos ninguna cercanía con ningún candidata o candidato de ningún partido tradicional. Nosotros no somos un regimiento, somos un partido político, y las personas a título personal podrán expresar las impresiones que quieran, y de hecho, el mismo Jorge Errázuriz decía que él no hablaba por el partido Ciudadanos. Pero la historia de nuestro partido es de independencia y de distancia de las opciones tradicionales, lo que nosotros queremos hacer es construir una opción distinta y nueva.
– Desde el sector de Sebastián Piñera dicen que es necesario buscar el centro político…
– Yo veo a Sebastián Piñera asociado con un partido conservador y tradicional como es la UDI, tomando posturas muy rígidas en materia valórica y de libertades públicas y por lo tanto, más allá de un intento u otro de acercarse al centro, me cuesta identificar a esa candidatura con ideas de centro, liberales y modernas.
– ¿Y qué le parece a usted Carolina Goic?
– Me parece muy bien que florezcan mil flores -como decía un líder chino-, lamentablemente esa flor parece haber nacido un poco marchita.
– La Nueva Mayoría en este elección irá con dos candidatos presidenciales y dos listas parlamentarias. ¿Cómo ve el panorama?
– Malo el escenario, qué duda cabe. La gente de la Nueva Mayoría es la primera en admitirlo, malo porque son los herederos de un gobierno que ha cometido muchos errores, que deja como legado una economía plana, un desempleo al alza, instituciones debilitadas, y por lo tanto, creo que los candidatos de la Nueva Mayoría, cuando vayan a los foros electorales, van a tener que explicarle a la gente por qué hicieron lo que hicieron.
– El que se ha mostrado como continuador de las reformas es el senador Guillier, abanderado de gran parte de los partidos de la NM. ¿Qué le parece su candidatura?
– Mi parecer es el mismo de mucha gente en Chile, me cuesta ver en esa candidatura ideas. Se ve una candidatura que nació cansada, cansina, y donde más allá de un esfuerzo por identificarse con lo que va quedando de las maquinarias partidistas de la izquierda, cuesta ver e identificar mucho más.
– Usted fue uno de los primeros en acuñar la frase “las malas prácticas en la política”. Sin embargo, el Frente Amplio tomó la consigna como suya en los últimos meses. Por estos días la gran crítica fue que pese a lo que dicen, cayeron en las mismas prácticas que cuestionaban de los partidos. ¿Qué opinión tiene de lo que pasó con Alberto Mayol?
– Bueno, lo que vimos en el Frente Amplio la verdad es que se parecía bastante a lo que hemos visto demasiadas veces en los partidos viejos, tironeos y codazos por quedarse con un cupo. La verdad es que eso no inspira mucha confianza, y ciertamente no revela modernidad.
– ¿Cómo ve a la candidata del FA, Beatriz Sánchez? Pese a que esta semana bajó un punto en las encuestas está al acecho de Guillier…
– Yo no veo que lo esté alcanzando, más bien se ve una candidatura estancada y cuando uno corrige con las personas que tienen una alta probabilidad de votar, el apoyo de Beatriz Sánchez se reduce más aún.
– Ahora, de acuerdo a lo que dice, habría que ponerse en un escenario de segunda vuelta entre Guillier y Piñera. ¿Qué fórmula usará Ciudadanos para determinar a quién apoyará?
– Lo vamos a discutir en su momento. Dependerá quién esté. Pero la alternativa de no apoyar a nadie sigue estando presente, pero es algo que vamos a discutir, en vez de hacer política ficción.
Candidatura por El Maule
– Usted es candidato por la región del Maule. ¿Cómo planteará su campaña?
– Se inspira en los mismos principios que mueven a nuestro partido en general, renovar la política, cosa que es especialmente indispensable en el Maule, que es la región de Chile que tiene los diputados y senadores que llevan más años sentados en sus asientos. Un promedio de más de 20 años en el cargo y eso corre tanto para los parlamentarios de derecha, como para los de la Nueva Mayoría; y lo que uno escucha en la calle, yo llevo más de un año trabajando y recorriendo el Maule -formamos el partido, recogimos las firmas-, es ‘ya basta, estamos cansados de los mismos’, que venga una alternativa nueva. Lo que nosotros vamos a hacer es tratar de darle forma a esa alternativa nueva, llevamos cinco candidatos a senador y 10 a diputado en esa región.
– En esta elección se dio que muchos querían ir por la zona. ¿Es por algo en especial?
– No sé cuáles serán las motivaciones de las otras personas. En mi caso es una decisión personal. Uno no elige dónde nace, pero sí dónde quiere servir. Yo tengo vínculos personales con la región porque la familia de mi padre era talquina, él fue candidato por el Maule hace muchos años, cuando yo era niño, y además porque la región del Maule es un lugar donde las promesas de la clase política se han vuelto especialmente poco creíbles. Es una región con mucho potencial, pero que lidera Chile en desempleo, en pérdida de industrias y de fuentes de trabajo, y de donde tremendos potenciales como la agricultura, el turismo, no están plenamente aprovechados, y yo quiero colaborar a rectificar eso.
– ¿Esos son los temas, que en el caso de salir electo, pondrá sobre la mesa?
– El tema de empleo es el tema número uno que surge en todas las conversaciones con la gente de la zona. Lo otro, es la salud, donde el actual gobierno por darse un gustito ideológico postergó la construcción del hospital de Curicó y de Linares, hay mucha gente, muy molesta porque no tiene dónde atenderse, tiene que ir a Santiago o a Concepción con la ansiedad, el costo, y el peligro que eso implica.