Primero descomponemos por deciles de ingreso autónomo la razón de Gini con el objeto de comprender si la caída en la desigualdad se explica por cambios al interior de cada decil de ingresos, o entre éstos. Primero, concluimos que no es la desigualdad al interior de cada decil la que contribuye fundamentalmente a la desigualdad agregada. En efecto, el 97,8 por ciento de la desigualdad observada se explica por el Gini entre deciles de ingreso. Luego, en la caída del Gini de -0,0257 puntos, la contribución intra deciles fue considerablemente menor que el cambio en la desigualdad entre éstos, lo que se refleja en que sus aportes relativos a la caída de la desigualdad fueron de 20,9 y 79,1 por ciento, respectivamente. Por tanto, la principal fuerza detrás de la disminución de desigualdad es el cambio entre deciles.
Posteriormente, descomponemos la desigualdad de las distintas fuentes de ingreso para comprender la relevancia de cada una de ellas al explicar la fluctuación del Gini agregado. Encontramos que la caída de la desigualdad de los ingresos provenientes del trabajo explica la mayor parte de esta disminución. El Gini de estos ingresos cayó en 0,019 puntos principalmente por una reducción en la desigualdad entre deciles. Luego, al analizar los ingresos monetarios, la disminución de la desigualdad en dichos ingresos también se debería principalmente a una caída en la diferencia de los ingresos del trabajo entre deciles con un aporte marginal de una mejor focalización de los subsidios laborales y sociales.
Entre 2009 y 2015, el ingreso las familias más pobres ha aumentado más que el de las más ricas. El ingreso per cápita del trabajo del primer decil creció en un 98 por ciento mientras que el de los hogares del décimo aumentó en 77 por ciento. Además, el aumento de un 77,3 por ciento en los salarios del primer decil es bastante superior que el de los trabajadores del decil de más altos ingresos. Estos últimos, entre 2009 y 2015, aumentaron sus ingresos en un 53,8 por ciento.
